El impacto negativo de RFID
La identificación por radiofrecuencia, o RFID, es una tecnología que utiliza pequeñas etiquetas electrónicas para almacenar y transmitir información. Cuando se expone a una onda de radio de la frecuencia correcta, la etiqueta transmite su información al escáner, lo que permite a los usuarios recopilar grandes cantidades de información rápidamente. Sin embargo, el uso de estas etiquetas para rastrear y almacenar información sobre personas ha generado algunas preocupaciones sobre su uso generalizado.
Etiquetas RFID
Las etiquetas RFID son pequeños dispositivos que contienen un circuito diseñado para almacenar información y una antena para recibir y transmitir señales de radio. Las etiquetas pasivas no tienen alimentación, dependen de la energía de la onda de radio entrante para alimentar la transmisión y tienen un alcance medido en pies. Las etiquetas activas contienen una fuente de energía integral de algún tipo y pueden transmitir a distancias más grandes. Los usos comunes de las etiquetas RFID incluyen codificarlas con información del producto para fines de inventario y codificar datos personales en documentos financieros o de identificación para acelerar la verificación.
Seguimiento
Las etiquetas RFID permiten a las empresas rastrear artículos en el inventario, pero si las etiquetas permanecen activas después del punto de compra, también pueden servir para rastrear a los consumidores. Por ejemplo, si compra una camisa y el empleado no desactiva la etiqueta, el identificador único en esa etiqueta aparecerá cada vez que regrese a la tienda para comprar, o vaya a cualquier otro lugar que use escáneres RFID para fines de inventario. Cotejar un escaneo de una etiqueta RFID usada con una compra puede brindarle a un minorista su información de identidad y, a partir de ahí, permitirles crear un perfil de sus hábitos de compras y gastos.
Privacidad
Las preocupaciones sobre la privacidad no terminan en el nivel minorista. Si la RFID se generaliza, la capacidad de rastrear a alguien a través de etiquetas pasivas en la ropa o en artículos transportados podría volverse importante en investigaciones criminales o disputas civiles. Las etiquetas RFID asociadas con compras importantes podrían proporcionar a los delincuentes información sobre los hogares adecuados a los que apuntar simplemente escaneando la basura en la acera. Las etiquetas RFID activas podrían incluso brindar información a terceros sobre el contenido de su hogar y sus actividades, todo sin su conocimiento.
El robo de identidad
Otra desventaja del uso generalizado de RFID es la posibilidad de que personas externas obtengan acceso a los datos de identidad. La codificación de datos personales en etiquetas RFID en pasaportes y otros documentos importantes puede acelerar los puntos de control aduanero y otras áreas donde los ciudadanos deben mostrar sus documentos, pero los terceros también pueden leer estos chips mediante el uso de un escáner sintonizado en la frecuencia correcta. Las agencias gubernamentales y las instituciones financieras que usan RFID codifican esta información, pero si un cifrado de uso común se rompe o se compromete, podría provocar un robo de identidad generalizado.
Referencias
Entradas Relacionadas