La mayoría de las computadoras portátiles vienen con parlantes incorporados, lo que hace que los problemas de audio sean particularmente frustrantes porque es difícil inspeccionar los parlantes y ver si hay algún problema obvio con la fuente de alimentación o el cableado. Sin embargo, lo más probable es que el problema esté en la configuración de la computadora o quizás en un controlador desactualizado o defectuoso, y no en los altavoces. Verificar si alguna configuración o controlador puede solucionar el problema es una buena idea antes de intentar abrir la computadora portátil o ceder y comprar altavoces externos.
